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Adeje 11 de Octubre de 2010
Hay Zapatero que combinaste
Ya he tenido manera de tocar el argumento de la situación muy delicada en la cual se han metidos los socialistas canarios. Copio aquí los titulares de algunos diarios, emblemáticos de la situación: Saavedra: "Hay que estar por encima de las batallitas internas”; “El PSC fulmina la corriente de Santiago Pérez”; “Las primarias de Santiago Pérez desencadenaron la ‘tormenta perfecta’ dentro del PSC”; “Y ahora le debe tocar el turno a la agrupación socialista de Arona que va mal, muy mal”. Son cuatros titulares que los dicen todos acerca de la situación de este partido.
Si como escribí ayer juntamos las defecciones del grupo extremeño que funda otro partido “pero de izquierda”, aclaran los protagonistas y la declaración hodierna del Presidente de la Comunidad de Castilla-La Mancha Barreda que profetiza: advirtiendo al PSOE de una "catástrofe electoral". En campo nacional es posible que la situación negativa del momento no se amplíe mucho más aunque los últimos apoyos al vencedor de las primarias de Madrid está aportando más cólera que unión con un volteo que muy poco comprenden.
Volviendo a cosas de nuestra casa he afirmado que la situación canaria resultaba mucho más frágil de la demás situaciones peninsulares. La reciente decisión del Comité Regional, como hemos visto en los titulares de los diarios, está ampliando demasiado la diferencia entre los socialistas. Aquí se está acentuando una división casi territorial, desde siempre alimentada da la prensa derechista, entre las dos islas capitalinas. Situación que en parte podría encontrar espacio en no pocos desprovistos socialistas.
Lo que es cierto es la fuerte división entre Santa Cruz y el Ejecutivo Federal. Una división que se está trasformando en un duro enfrentamiento si es verdad la declaración que llega desde Santa Cruz: “Si la [ejecutiva] federal respalda esta decisión, acudiremos a los juzgados", advirtió anoche el presidente destituido en Santa Cruz, Pedro Anatael Meneses. "No estamos de acuerdo con esta decisión y todos los socialistas de Tenerife lo denunciaremos".
Resulta impensable que esta división no vaya a tocar el electorado socialista. Es un movimiento subyacente que es imposible averiguar y aunque la ambición, la falta de principios ideológicos, el mantenimiento de determinados cargos y prebendas portará seguramente a muchos medios o alto cargo a aguantar la vela, diferente puede ser la reacción de la base. Creo que será difícil ver una escisión en el partido, pero sí en las próximas elecciones municipales.
Saavedra, Pérez, Fraga y los alcaldes del sur de Tenerife habrán reflexionados sobre la posibles consecuencia suicida, de esta demasiado impulsiva decisión. La base, creo, que hay averiguado que hemos llegado, posiblemente, a un punto de no retorno, debido, si, a una lucha que viene desde lejos, y que básicamente se encarna, pe personaliza principalmente entre Saavedra y Aguilar. Tiene, esto sí, un trasfondo político.
Desde tiempo vengo sosteniendo que una visión no de izquierda, tan solo mínimamente de izquierda, no podía convivir con una clara, marcada línea socialdemócrata. Las decisiones y actuaciones en campo nacional de Zapatero, que han proporcionado un pelilloso choque con los sindicatos junto con la decisión imperativa, de claro estilo estalinista de la regional canaria dejará su signo, aunque se intente una recomposición de última hora.
Los amigos santacruceros, considerada la posición neta, limpia tomada en el Convenio de El Magma en Adeje, ¿cómo justificaran a los militantes un cambio de tal calibro? Y los militantes que alababan a aquel cambio ¿Qué harán, donde están? ¿Comprendieron lo que comportaba la aprobación de aquellas conclusiones? ¿Y la derecha del partido como justificará las muchas acusaciones lanzada irresponsablemente a Tenerife y Santa Cruz? Para cumplir con el hecho ¿pedirá la intervención de los barones nacionales Blanco y Rubalcaba?
La situación está abierta a todas las posibilidades posibles.
Benito Capone
