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Tenerife 17 de Abril de 2008
¿Paz parlamentaria o vergüenza ciudadana…?
Juan  Manuel Fernández del Torco Alonso

Estamos de enhorabuena, el sosiego al fin ha  llegado a la calle Teobaldo Power, donde se ubica nuestro Parlamento de Canarias, o lo que es lo mismo, el crisol donde se funden los intereses de nuestro pueblo. Aunque este aparente “armisticio”, esta especie de “paz armada”  se deba al acuerdo sobre la necesidad de aumentar los estipendios de nuestros tribunos y tribunas. Lo que no se ha conseguido, en aras del deseable interés general, por medio del diálogo, la moderación, la negociación y el consenso, se ha logrado  por la vía de la bolsa; el tintineo del dinero los unió y para este prioritario y noble finalidad, el consenso político, ¡afloró!

Sus señorías arguyen, que la medida, sólo pretende homologar los complementos institucionales al resto de los parlamentarios de otras Comunidades Autónomas.., aunque omiten, que probablemente es una anticipación a los previsibles límites que se impondrán a este tipo de “urgentes necesidades” , en un inevitable plan de choque del nuevo gobierno del presidente Zapatero, ¡eso sí!, aunque el aumento, solo lo sea incorporando, lo que nuestra clase parlamentaria denomina, “medias pagas”.

¿Medias pagas?, ¡dos mil y pico euros!.., cifra que implica cuadruplicar el “quantum” del salario mínimo que ya perciben; comparativamente, determina una cifra desorbitada en cuanto a las pensiones no contributivas y de viudedad,  e incluso llegan a solventar con esta actuación, de indudable oportunismo sectario, el problema de la homologación de los/as docentes, si bien, sólo para aquellos/as   parlamentarios/as que hayan ejercido la docencia, sin exigencia de reclamación o preaviso de huelga alguno.

Tenían razón nuestros clásicos …”… el vil dinero hacen caer torres, y supera valles…”…, e incluso, posiciones irreconciliables, como es el “hacer” nacionalista, popular o socialista; sin embargo, para los legítimos representantes que no sólo hablan canario y postulan el cambio, e incluso aducen cosas bien hechas.., el sentir de la ciudadanía en períodos ajenos a la campañas electorales, resulta irrelevante.

Lo relatado, es poco edificante.., y esto ha de tener conocimiento público, para que aunque sea por la vía del pudor o de la vergüenza ajena, se cambie, se modere, se impida. El ejercicio de la política no puede consistir en un ascenso meramente retributivo, sino en una inequívoca, inconfundible y ejemplar  vocación de servicio.

Juan  Manuel Fernández del Torco Alonso.
Presidente de Cican. Centro Independiente de Canarias.