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San Miguel 22 de Abril de 2008
Tacoronte: “Cambiar el nombre
a una calle no es una de las
prioridades de San Miguel”
La portavoz popular afirma que “con esta
propuesta del Ayuntamiento serán los vecinos
y comerciantes quiénes tengan que asumir
los costes”
La portavoz del Partido Popular en el ayuntamiento de San Miguel de Abona, María José Tacoronte, discrepó con el actual grupo de gobierno sobre las prioridades y demandas que el municipio reclama ya que “cambiar el nombre a una calle no es una de las prioridades de la localidad, sino que más bien es un perjuicio para los vecinos y comerciantes que residen en la misma y que tendrán que asumir los gastos que esta modificación genera”. Tacoronte hizo estas declaraciones tras aprobarse, en el último pleno de la Corporación, una propuesta del grupo de gobierno que pedía el cambio de denominación de la calle General Franco por calle de La Iglesia.
En este sentido, la concejal aclaró que “el PP de San Miguel no se opone a que se cambie de nombre a una calle siempre y cuando el Ayuntamiento, como ya explicamos en la comisión informativa, se comprometa a asumir los costes que esto provocará en los vecinos y comerciantes ya que aunque parezca una simpleza, las personas que residen en la misma tienen ahora que pagar los cambios de DNI, permiso de conducir y pasaportes, entre otros documentos, y esto supone pérdida de dinero y de tiempo”.
“Además- continuó Tacoronte- se ven perjudicados los autónomos y comercios que se encuentran en la calle ya que tendrán que hacer frente a los cambios de publicidad insertados en cualquier medio o bien en las tarjetas de presentación, teniendo en cuenta, asimismo, que estas últimas suelen encargarse en grandes cantidades y, ahora, con esta nueva denominación no serán utilizables”.
La concejal popular consideró que “cuando un grupo de gobierno toma decisiones también deben barajar las posibles consecuencias que éstas tienen para los vecinos y, en este caso, las hay porque cambiar el nombre a una calle no es sólo cambiar la placa que la identifica al principio o al final de la misma, sino que detrás de esta actuación hay numerosos vecinos que tendrán que moverse para notificar a sus bancos, suscripciones y demás entidades dicha modificación”.
De esta manera, Tacoronte espera que “también se haya previsto un plan de actuación con la oficina de Correos porque si bien es cierto que los actuales funcionarios estarán al corriente del cambio, hay que asegurar que los futuros trabajadores lo tengan en cuenta ya que de esa previsión se garantiza que los vecinos sigan recibiendo su correspondencia”.
