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Canarias 20 de Diciembre de 2011
El Laboratorio de Residuos Fitosanitarios de Canarias acredita la seguridad alimentaria de los vegetales que
se producen en las Islas
Los análisis acreditados abarcan 85 plaguicidas diferentes en las matrices vegetales: plátano, tomate, pimiento, zanahoria, puerro, uva, naranja y mandarina.
La consejera de Empleo, Industria y Comercio, Margarita Ramos Quintana, y el consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas, Juan Ramón Hernández Gómez, presentaron ayer las actividades que desarrolla el Laboratorio de Residuos, una infraestructura del Gobierno de Canarias, gestionada por el Instituto Tecnológico de Canarias (ITC), que acaba de recibir la acreditación de la Entidad Nacional de Acreditación (ENAC) para la realización de análisis de residuos de plaguicidas en los vegetales frescos que se producen, destinados tanto al consumo interno como a la exportación.
Este laboratorio, perteneciente al Departamento de Análisis Ambiental del Instituto Tecnológico de Canarias, desarrolla su actividad en las instalaciones de la Consejería de Agricultura del Gobierno de Canarias, ubicadas en el Polígono Industrial de Arinaga, en el municipio de Agüimes, donde se analizan las muestras vegetales que proceden tanto del sector público (administración canaria) como del sector privado (productores de frutas y hortalizas) para detectar la presencia de residuos de plaguicidas que puedan resultar nocivos al consumo o afectar a la calidad del producto vegetal fresco a comercializar.
Durante la presentación del Laboratorio de Residuos, la consejera de Empleo, Industria y Comercio del Gobierno de Canarias, Margarita Ramos, destacó la importante labor que está desarrollando el Instituto Tecnológico de Canarias en este Laboratorio, que cuenta con personal altamente cualificado, y dijo que con los análisis de residuos de plaguicidas que se llevan a cabo en las frutas y hortalizas que se producen en el Archipiélago, “se garantiza la seguridad” de estos productos para los consumidores finales. También se refirió a la necesidad de que existan garantías de seguridad y salud para los que trabajan en contacto con estos pesticidas en el campo.
Por su parte, el consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas del Ejecutivo regional, Juan Ramón Hernández, destacó que la puesta en marcha de este servicio de control fitosanitario, ha sido posible gracias al esfuerzo y colaboración entre distintas administraciones (Gobierno de Canarias y Ayuntamiento de Agüimes), y resaltó que a través de este centro y a la actividad que desarrolla “tenemos la garantía, desde el punto de vista fitosanitario, de que la producción agroalimentaria en las Islas se realiza, en cuanto a calidad y seguridad alimentaria, cumpliendo con la normativa comunitaria”.
Asimismo dijo que desde el Gobierno de Canarias “es necesario realizar un nuevo esfuerzo” para poder ampliar la acreditación actual del Laboratorio de Residuos que le permita incluir nuevos análisis de plaguicidas en otras matrices.
En el acto de presentación estuvieron presentes, además de los citados consejeros, el alcalde de Agüimes, Antonio Morales, el consejero delegado del Instituto Tecnológico de Canarias, Nicolás Díaz Chico, el alcalde San Mateo, Antonio Ortega, así como los jefes de servicio de sanidad vegetal y seguridad alimentaria, y técnicos del sector productor de Canarias.
El ITC realiza esta actividad por encomienda del Servicio de Sanidad Vegetal, adscrito a la Dirección General de Agricultura y Desarrollo Rural del Ejecutivo regional, con el objeto de ejecutar los Planes de Vigilancia de Residuos de Productos Fitosanitarios en origen, que son competencia de dicha dirección general.
Recientemente, el Laboratorio de Residuos acaba de recibir la acreditación para la realización de ensayos de análisis de residuos de 85 plaguicidas diferentes, por cromatografía de gases con detección por espectrometría de masas/masas, en las matrices vegetales: plátano, tomate, pimiento, zanahoria, puerro, uva, naranja y mandarina.
Ampliar la acreditación
Ahora, el siguiente paso, tal y como anunció el consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas, es solicitar la ampliación del alcance de la acreditación para que le permitan incorporar, por un lado, nuevas matrices, como la papaya, pepino, vino, lechuga, sandía y calabacín y, por otro lado, nuevos ensayos de análisis, que permitan ampliar el número de plaguicidas dentro del alcance de acreditación, para dar respuesta a las necesidades de la sociedad canaria en materia de residuos fitosanitarios en productos vegetales.
Las muestras que actualmente se analizan procedentes del sector público, corresponden a los departamentos con competencias de control en materia de residuos de productos fitosanitarios, como son el Servicio de Sanidad Vegetal de la Dirección General de Agricultura y Desarrollo Rural; el Instituto Canario de Calidad Agroalimentaria y el Servicio de Seguridad Alimentaria de la Dirección General de Salud Pública.
El Laboratorio de Residuos, desde que inició su andadura en el año 2003, oferta un servicio de análisis de residuos al sector privado, servicio que ha sido muy activo para el sector en los años precedentes, pero que necesitaba imperiosamente que los ensayos de análisis estuvieran acreditados. A partir del 2012, con la acreditación obtenida, el Laboratorio podrá ofertar un servicio de mayor valor para los productores de las Islas.
Estos servicios de análisis que presta el Gobierno de Canarias a través del Instituto Tecnológico de Canarias están “muy valorados y apreciados” por el sector productor, no sólo por el propio servicio de análisis que se oferta, caracterizado por la rigurosidad en la ejecución de los análisis y la celeridad en la entrega de resultados, consciente de la necesidad de los productores por obtener en el menor plazo posible resultados fiables, sino por la actividad paralela de I+D que se desarrolla en el Laboratorio, dentro de los objetivos del ITC, en apoyo al sector, como lo demuestra el número de ensayos de campo y laboratorio que se realizan cada año.
Pese al esfuerzo que están realizando estas dos entidades, el número de muestras analizadas no es representativo del consumo de productos vegetales en las Islas. De ahí que el Laboratorio de Residuos Fitosanitarios de Canarias se haya convertido en un instrumento imprescindible y de gran utilidad para garantizar la calidad de todos los vegetales que se consumen en las Islas, bien producidos o no en el Archipiélago y obtener el mayor número de datos que permitan observar, de un modo más amplio, el panorama de seguridad alimentaria en los productos vegetales que se producen y que se consumen en Canarias.
Actividades del Departamento de Análisis Ambiental
El Departamento de Análisis Ambiental del ITC, al que pertenece el Laboratorio de Residuos Fitosanitarios, no sólo ofrece servicio de análisis de residuos de plaguicidas al sector agrario, sino que además desarrolla actividades de I+D en esta área de conocimiento. La actividad de I+D se desarrolla a través de ensayos de campo y laboratorio, destinados a dar respuestas rápidas a los problemas de los productores y a los problemas de los departamentos de la Administración en su labor de inspección y en su labor de apoyo y soporte a la producción agrícola de las Islas.
Dentro del alcance genérico del estudio del comportamiento y destino ambiental de los productos fitosanitarios y sus residuos, con los objetivos de mejorar y garantizar la seguridad alimentaria en Canarias en lo que a residuos de productos fitosanitarios (plaguicidas) se refiere y, de prevenir y minimizar la contaminación del medioambiente Canario producida por el uso de estos productos en la agricultura, el ITC ha centrado sus esfuerzos en el desarrollo de proyectos de investigación aplicada con el siguiente denominador común: Estudio de curvas de disipación de productos fitosanitarios utilizados en diferentes cultivos agrícolas, con el objeto de optimizar los tratamientos fitosanitarios, integrando el cumplimiento de los plazos de seguridad correspondientes y una máxima eficacia en la protección de los cultivos con la menor aplicación posible de productos.
