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Canarias 9 de Abril de 2011
Rodrigo Rato afirma que en Canarias se está percibiendo con más intensidad los síntomas de recuperación económica
España ha optado por unos niveles de exigencia de capital de entre el 8 y el 10%, claramente superiores a la media europea y mundial.
El presidente de Bankia manifestó que la economía de nuestro país está empezando a mostrar ligeros síntomas de recuperación, “unas buenas sensaciones” que, según dijo, en Canarias se están percibiendo más”, al calor del buen comportamiento del sector turístico. Así lo aseguró ayer, en el Casino de Tenerife, el presidente de Bankia, Rodrigo Rato, durante la conferencia organizada por la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife y la CEOE- TEnerife para analizar los nuevos retos que impone la exigencias de la reforma del sistema financiero español.

Durante su intervención explicó que la salida de una crisis de tan grandes dimensiones como la que estamos viviendo no puede ser rápida. En este sentido, dijo que España ha pasado de un potencial de crecimiento del 2,5% antes del estallido de la crisis, a apenas llegar al 1,5.

La conferencia del presidente de Bankia contó con la presencia de más de 300 empresarios, representantes de patronales empresariales y autoridades como el presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, el presidente del Cabildo tinerfeño, Ricardo Melchior, los vicepresidentes del Cabildo, José Manuel Bermúdez Esparza, y Antonio Alarcó, la presidenta del Partido Popular en Tenerife, Cristina Tavío, los presidentes de la Cámara de Comercio y de CEOE-Tenerife, Ignacio González Martín, y José Carlos Francisco, respectivamente, entre otros.

Por otra parte, comentó que la petición de rescate de Portugal a la Unión Europea tras la fuerte presión de los mercados sobre su deuda soberana no es un factor de riesgo para la economía española. Según Rato, “a España le conviene que Portugal se estabilice, porque las continuas tensiones en nuestro país vecino suponían un factor de incertidumbre que, realmente, sí podía ser negativo”. A su juicio, España depende de sí misma para evitar un rescate. Tal y como indicó, “se han tomado medidas y si hacemos bien los deberes, la confianza en nuestra economía no tiene por qué caer. Así que, el futuro está en nuestras manos, no en las de Portugal”.

También se refirió a la política monetaria del Banco Central Europeo (BCE) y su reciente decisión de incrementar el precio del dinero hasta el 1,5%. Según dijo el presidente de Bankia, es previsible que la autoridad monetaria de la Unión practique nuevas subidas en el tipo de interés, aunque no demasiado elevadas. Para Rato, el BCE tiene claro que las tensiones inflacionistas en carburantes y materias primas no son coyunturales, de ahí la necesidad de una política de encarecimiento del dinero. En este sentido, dijo que quizás uno de los riesgos es que el euro se robustezca demasiado frente al dólar, e hizo hincapié en el hecho de que en la política monetaria de Europa tengan más peso países como Alemania, con un ciclo económico tradicionalmente diferente al Español, y que, por tanto, se ajusta mejor a sus necesidades que a las nuestras.


Cambio radical el sistema financiero
Rodrigo Rato hizo un amplio repaso sobre lo que ha supuesto para las cajas las nuevas exigencias de capital establecidas por el Gobierno, “un proceso que, según dijo, era necesario para fortalecer unas entidades que representan la mitad del sistema financiero español y para alejar el fantasma de la duda sobre su solvencia. Según explicó, “España ha optado por unos niveles de exigencia de capital de entre el 8 y el 10%, claramente superiores a la media europea y mundial, algo que calificó de positivo para seguir reforzando la calidad de un engranaje financiero que, según dijo, ha demostrado ser uno de los más fuertes de la Unión.

El presidente de Bankia afirmó que entre las principales consecuencias de estas exigencias de recapitalización no sólo se encuentra la disminución del mapa de cajas de ahorro en España, que están sumidas en un amplio proceso de concentración y saneamiento, sino el encarecimiento de los precios y de las condiciones crediticias. Sobre este punto, el presiente de Bankia reconoció que durante la etapa de crecimiento y del boom inmobiliario la relación entre el capital de las cajas y lo que prestaban llegó a ser de 1 a 42, cuando lo recomendable es que no superaran una relación de 1 a 12.

En cualquier caso, Rodrigo Rato rechazó que las entidades financieras hayan  cerrado el grifo del crédito. Según dijo, “la caída en la concesión de créditos desde 2007 no ha sido tan grande, lo que sucede es que, al no crecer la economía las solicitudes de financiación también bajan”. Tal y como indicó, “la curva de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) siempre va en paralelo de la curva de desarrollo del crédito. Si el crecimiento cae, la financiación también”.     

La nueva banca
Bankia es el resultado de la unión de Caja Madrid, Bancaja y las cajas Laietana, Insular de Canarias, Ávila, Segovia y La Rioja. Según, Rato, “la nueva entidad se ha convertido en el primer banco de España por volumen de negocio doméstico, con 485.900 millones y es la fusión más ambiciosa de las realizadas hasta ahora”. Según su presidente, sus activos, 328.000 millones, número de comunidades autónomas implicadas, 6, y plantilla, 27.000 personas, la han convertido en la referencia para el éxito o fracaso de la reestructuración financiera española.

Rodrigo Rato dijo que el objetivo de Bankia conseguir para 2013 una mejora de su eficiencia de 500 millones de euros, “para lo que es necesario llevar a cabo una política en la que se combine la recapitalización, el saneamiento, y una oferta de nuevos productos y servicios adaptados a las nuevas necesidades de pymes y familias”. En cuanto a la obra social de las cajas, Rato insistió en la necesidad de mantener ese componente de compromiso con el territorio en el que están implantadas que siempre han tenido las cajas, “ya que es, precisamente este elemento el más valorado por los clientes y el que ha permitido a las cajas mantener su fidelidad y confianza a pesar de las constantes noticias acerca de sus necesidades de reestructuración y recapitalización”.