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Adeje 17 de Abril de 2010
“El Hermano Pedro fue un precursor
de los derechos humanos”
Fotos: Dux Garuti
Nelson Díaz Fría, autor del libro, El santo hermano Pedro de Bethencourt y su familia: guanches, canarios y repobladores hispanos en el Tenerife del s. XVI, destaca en su segunda obra dedicada a este personaje el aspecto familiar y la genealogía de sus antepasados.
G.C/EDS. El personaje más universal de la historia canaria, de Tenerife, y concretamente del Sur, es el Hermano Pedro. Este santo canario tiene actualmente en el Sur de la isla quien se ocupe de su historia, de sus hazañas, y de su vida dedicada al prójimo, ya que fue “un precursor de los derechos humanos”, según Nelson Díaz Frías, autor de libro, El santo hermano Pedro de Bethencourt y su familia: guanches, canarios y repobladores hispanos en el Tenerife del s. XVI.
Esta obra es la segunda que presenta el autor dedicada al Hermano Pedro. En esta ocasión, aparte de incluir una biografía del santo “hago referencia a aspecto inéditos sobre su familia que en su mayor parte eran antepasados aborígenes de Gran Canaria, guanches de Tenerife, y antepasados de la península ibérica”. Lo que pretende Díaz Frías con este libro es “explicar al lector moderno cómo era la vida en el Sur en el siglo XVI a través de estos antepasados, de los cuales muchos de los vecinos de esta isla descendemos”, manifiesta el historiador a eldigitalsur en una entrevista previa a la presentación del libro en el Convento de Adeje.
La familia del Hermano Pedro, dice, “es una típica familia campesina del siglo XVII, evidentemente muy religiosa que vivía la religiosidad conforme a la fe de aquel momento, muy arraigada a las tradiciones”. Precisamente, fruto de esa religiosidad, el Hermano Pedro tenía unos parientes de vocación devota “y él mismo sintió la llamada de Dios, decidió cruzar el Atlántico y trasladarse a las colonias españolas en América para servir a la fe católica”.
Nelson Díaz Frías es un gran admirador del Hermano Pedro, más que todo por la labor y el servicio que prestó a las personas más necesitadas. “Siendo un simple pastor, no analfabeto, pero no tenía una gran ilustración, eliminó y no tuvo en cuenta los prejuicios de la época en una sociedad en la que estaban totalmente estratificadas las clases sociales, y adelantándose a ese tiempo supo olvidar estos prejuicios y se ocupó de las personas más desfavorecidas, como una especie de precursor de los derechos humanos”. En aquellos años no se tenía en cuenta la educación de los niños, no existía un sistema de cobertura social para todo el mundo, “y sin embargo el Hermano Pedro, de su sueldo, sacaba para pagar a un maestro para que diera clases a los niños pobres, que de otra forma no hubiesen poder tenido acceso a la educación”. Además, se ocupaba de los esclavos, “que era la voz más marginal de la escala social de la época”, se ocupaba de las personas que sufrían enfermedades estigmatizadas para entonces, como la lepra, y de los presos. “Lo llamativo es que pudo vencer todos los prejuicios, y en este sentido su mensaje es intemporal, se aplica a todo tiempo y lugar”.
Un escritor siempre cree en lo que escribe, no podía ser menos tratándose de un historiador con fe en un personaje canonizado por la iglesia Católica. “Soy creyente y le rezo al Hermano Pedro, en mi caso es evidente que me he encomendado a él”. Además de esta obra, Díaz Frías ha escrito sobre la historia del Sur del Tenerife, reconoce ser un apasionado de la historia universal, de España y de Canarias, “y uno tiende a hondar en sus raíces de la zona geográfica de donde procede”.
Mañana se celebra la V Ruta del Hermano Pedro que parte desde Vilaflor hasta la cueva del santo en El Médano. “Recomiendo a todo el mundo, desde el punto de vista religioso y turístico por el paisaje que se admira, que haga la ruta”. Hace ya unos años hizo este camino, no obstante, posiblemente por el trabajo que desempaña como Juez, que requiere de mucho tiempo, “ahora mismo no sé si pudiera hacerla”.
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Comentarios
Felicidades por el libro, ahora aparca tus hobbies y ponte a lo que te tienes que poner que hay muchos malechores merodeando por arona, no permitas que estos acaben con el pueblo que te vio nacer.
