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Tenerife 6 de Abril de 2010
“La CEOE-Tenerife miente cuando habla
de cambio del modelo económico”
Parece una broma macabra que a estas alturas la Ceoe de Tenerife se lamente
de que los indicadores económicos recogidos en su Plan de Desarrollo Empresarial Canario, de noviembre de 2006, (financiado, curiosamente, por el “criticado” Gobierno de Canarias) y que, según ellos, sirven para determinar la evolución hacia un nuevo modelo económico, que supere el actual basado en el turismo y la construcción, progresan de forma desfavorable.
Resulta grotesco que José Fernando Rodríguez de Azero, presidente de este lobby, pretenda convencernos de que las propuestas recogidas en aquel plan signifiquen un proyecto de verdadero cambio de modelo productivo, cuando en realidad no es más que un intento de dar un cierto empaque científico a las demandas históricas de un empresariado acostumbrado a gobernar a los gobernantes.
Desde Asamblea por Tenerife nos parece poco fiable un estudio que tras un recorrido técnico por nuestras supuestas “fortalezas-debilidades”, “oportunidades-amenazas” y “análisis Dafo”(esta es la terminología del estudio) configura unos escenarios tan disparatados que, partiendo de los datos de 2005, estimaban que la tasa de paro para el 2010 no superaría el 11 % o el 18% en 2020 y pronosticaban un crecimiento del PIB de un 2.53%, cuando en el escenario real de 2009 el paro ya superaba el 25% (14 puntos de diferencia) y el Producto Interior Bruto se situaba en un -3.8% ¿Cómo es posible que no fueran capaces de ver la hecatombe socioeconómica que se nos venía encima tan sólo a un año vista? Vaya profetas estos de la Ceoe ¿Cómo creerles cuando afirman que si somos obedientes y se llevan a cabos sus directrices –lo que el estudio define como “escenario competitivo”- en 2015 tendríamos unas idílicas tasas de paro del 8.50% y un crecimiento del PIB del 3.42 %?
Lo cierto es que la patronal tiene mucha culpa de esas altas tasas de desempleo, de exclusión social y de pobreza. La Ric y otras medidas incluidas en el REF, con las que el empresariado se ha enriquecido en tiempos de bonanza y que le han servido para cubrir pérdidas en tiempos de crisis, han resultado ser eficaces mecanismos de evasión de impuestos aunque inútiles como agentes para la “creación de empleo” y que fue la excusa que se utilizó en su día para conseguir su instauración. Pero, con todo, siguen empeñados en seguir aplicando sus nocivas recetas neoliberales: austeridad en el gasto público (recortes en sanidad, educación, servicios asistenciales y derechos laborales), reducción de la presión fiscal, abaratamiento del despido y aumento de la “flexibilidad”, así como mano dura contra el absentismo o la exigencia de que las administraciones públicas disminuyan los salarios de los funcionarios para que la empresa privada se haga con mano de obra cualificada a precios de ganga…
Pero esa reducción del gasto público se remata con una inyección económica a la inversión, es decir, a sus empresas, y por eso la patronal exige la construcción de grandes centros logísticos con su corolario de infraestructuras portuarias (Puerto de Granadilla, por supuesto), segundas pistas en los aeropuertos de los Rodeos y del Sur, cierre del Anillo Insular y trenes del norte y del sur, a lo que se unen otras exigencias como la remodelación de la planta hotelera, rebaja de las tasas aeroportuarias, adecuación de las infraestructuras para el turismo de crucero, introducción del gas natural (volvemos al Puerto de Granadilla) o construcción de más centrales eléctricas. Todo ello a pesar de las desastrosas repercusiones que tendrían estas obras sobre nuestro ya cascado medio ambiente, y si existiera alguna medida legislativa que se lo impidiera no dudarían en cambiar la Ley como intentan hacer con el Catálogo Canario de Especies Protegidas.
Desde Asamblea por Tenerife denunciamos una vez más estas políticas desarrollistas, basadas en falsedades e implementadas por el Gobierno de Canarias a instancias de una clase empresarial que sólo actúa pensando en su exclusivo beneficio económico, sin que le importe mucho ni poco el bienestar general de la ciudadanía y sin pensar para nada en unas verdaderas perspectivas de futuro para nuestro pueblo.
Comisión Técnica de Asamblea por Tenerife
