Como se esperaba han entrado las consabidas "purgas" en la RTVE (Radio Televisión Española), o sea, la que dicen que es la de todos. Se ha tenido y mantenido un tiempo de calma, pero el malestar ha vuelto a casa con más virulencia si cabe y en especial con su director Luis Fernández.
Los Sindicatos, que cada día parece que aceptan más irregularidades, están ya solos en la galería de los "fósiles de antaño". ¿Quién se acuerda ya de los Sindicatos?. Comprobado que un porcentaje altísimo de trabajadores cuando tienen un problema, optan por contratar a un letrado laboralista y punto.
Este goteo de profesionales con experiencia y queridos por la audiencia que están eliminando de la plantilla de la RTVE es sabido. Eso si, la excusa que dan los sabios de la casa es que hay que estar buscando caras nuevas, jóvenes y risueños, en fin, caras, si señor, son las que prefieren a las que se les vislumbra un buen futuro para así pelotear a los ineptos que a dedo político de un postura que emana de la política ramplona que nos gobierna pone a sus amiguetes a dedo de "Colon".
Los fichajes estrellas es lo que se está primando en el Ente público de RTVE, por mucho que se dejen las meninges en los cambios que están haciendo y quieren hacer, esta idea de nuevas caras sigue unas tremendas directrices que apabullarían hasta el "Guerrero del Antifaz", por su marcaje político sobre profesionales periodistas que han populado por la casa y al no estar en su cuerda, puerta, aquí en Canarias conocemos algunos de estos buenos profesionales que han sido castigados a no estar en el Ente.
El ambiente que se respira tanto en la radio como en los platós no es bueno, En la radio han prescindido de periodistas como Manuel HH y su equipo, líder en audiencias en horas tan difíciles como de 2 a 4 de la madrugada. Directores de primera linea jubilándolos anticipadamente, realizadores, cámaras, y así un buen número de profesionales de gran calado técnico y periodístico, los hombres del tiempo, el amigo Maldonado y Montes de Oca, han sido obligados a dejar sus puestos.
Así que los sabios de la caja tonta han pensado de por qué no contratar a los profesionales de la 5 y así tratar de incorporar también esos programas"basura" que son tan baratos y hacen subir la audiencia, y de paso le ahorramos dinero al presupuesto.
Todo va en evolución, la gente cada día persigue tener más sapiencia, los tiempos así lo piden. Pero por lo que vemos y por el sentido que pretenden dar a la "Pública" es como si quisieran quedarse anclados en el Paseo de la Habana y no acordarse de esa gran profesionalidad que de allí emanó, y ha estado hasta el presente, por mucho que ahora defenestren atropelladamente a los que Sí han dejado una forma de hacer Televisión y radio en este país.
Salvador Barnes