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Arona 14 de Enero de 2013
Urge una solución
Estamos entrando en el prólogo de grandes
acontecimientos que tendrán lugar en este País.
Acontecimientos que ya hace años que se veían
venir, y que tarde o temprano serán toda una actualidad,
porque ya no hay materia para poder tapar tantos descontentos, y poner parches a lo que ya no pega, los temas se tienen que cumplir o simplemente se tienen que olvidar.
El tema de soberanismo catalán está haciendo mella en el sentir de todos aquellos que vivimos en esta Nación, llamada España. Para unos que no acaban de querer entender que todo tiene el deseado trato de la conversación, del tratar de que todo sea asequible para todos los que lo crean y para los que no lo crean, pero sin duda lo que no se tiene ni por asomo que apostar es por un arreglo basado en el pasado siglo, que se hacía todo a golpe de fusil y de desaforados cubriendo las calles.

Estas formas, y todos los sabemos, dejan bajas en uno y otro bando, los que se sienten oprimidos y los que juran que nunca lo hicieron. Cuando viene una crisis económica y social como la que estamos arrastrando, es casi obligado que las clases más castigadas tengan las voces más distorsionadas que se puedan oír en el País.

Son muchos atropellos que la población está sufriendo, con un castigo más que desmesurado, no se ve que las autoridades políticas que deben de redondear la situación, hagan algo por remediarlo. Solo saben amontonar las culpas de que Europa es la que nos marca la forma de seguir en la política en este País, esto parece más que una perogrullada, el ciudadano no lo acepta, no entiende el porqué España sigue teniendo seis millones de parados, en donde cada día se es más pobre, que las estampas de usura se ven a diario por esos bancos que van a su entero apaño, que se ha pasado a tener una vejez deshonrosa porque así lo quiere el "establiment", volveremos a los asilos de ancianos, a las limosnas colectivas para los viejos y sin hogar, algo que los que somos de la generación de después de la guerra todavía lo vivimos, y nadie hubiera esperado nunca que volviéramos a ver toda aquella vida gris que nos ofreció el franquismo, con cartillas de racionamiento, el estraperlo, las colas para que te dieran algo de comida la Falange y la sección femenina, a coger la sobras del rancho de los cuarteles, a reclutar para las casa de los ganadores fascistas chachas para limpiar los suelos arrodilladas dejándose la vida para traer algo de pan a sus casas.

No, esto no es una escena copiada de Dikens, es una apestosa realidad la que se vivió durante casi veinte años, así que nos ponemos las manos a la cabeza cuando vemos que algunos de estos cachorros de aquel régimen siguen apretando las tuercas al "pobre españolito", que aguanta lo que se le tire, y todo esto hace un gran alud que amenaza en deslizarse y sepultar a todo lo que coja a su paso.

Cataluña, por lo que vemos no tiene en absoluto ningún miedo en seguir adelante, se están ultimando lo que será ese Estado catalán que es el que están pidiendo. Por parte del Gobierno y de mucha más gente siempre adicta a las tradiciones, están en contra y siguen reflotando diciendo que lo que están haciendo va en contra de la Ley, están fuera de la Constitución, que están jugando con fuego, que se encontrarán solos, que Europa no les va apoyar en esa locura secesionista, y que para algunos núcleos del Ejército esto no está bien visto. Porque se ha jurado la unión de España y sobre los Evangelios defender la Constitución y más zarandajas que se le quieran añadir a todo este aglomerado de acontecimientos, bravuconadas, avisos, amenazas, desprecios. A todo esto hay que hacer caso omiso, eso nos faltaba a este País contiendas interiores. Pero por lo que vemos el Gobierno de España se ha centrado solo en dialogar haciendo su política desde detrás de la "tronera", ha sido incapaz Rajoy de abordar la situación, que como hemos dicho empieza a oler algo mal, y en el viaje de la inauguración del Ave tuvo a medio metro a Mas para poderle como mínimo preguntar por la situación, y no estar como un D. Tancredo a esperar que venga el toro a ver si le pilla.

De seguir en esta guisa de esconderse ante una enorme adversidad para el Gobierno y para muchos españoles, Rajoy tendría que hacer una política en la que diera entrada a todas las fuerzas políticas de esta Nación, no tratar de solucionarlo él, que no lo hará. Así que no es descabellada la situación de hacer un gran consenso y dar entrada de opinión a todos, pues a todo no va esta situación, que sabemos que está en puertas de realizarse en poco tiempo. Y ya ven, están a la luna de Valencia, como una partida de ping-pong, solo oyendo lo que dice unos y le replican otros. Una fea forma de solución que es la que tendrá este plante por no tener en España políticos que tengan eso, lo que tienen que tener unos estadistas, la templanza en saber afrontar las cosas con esa diplomacia que debe de conllevar todo político.

Esto no solo tiene que resultar para Cataluña, luego o posiblemente al unísono será el País Vasco, y algo no muy lejos, será el plante de Canarias que ya empieza a estar demasiado dejada de la mano política del poder Central de España.

Salvador Barnes
doropress@gmail.com