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Arona 21 de Enero de 2010
De profesión “usurero”
Hay que ser muy, pero que muy indecente para realizar
con alevosía y nocturnidad, aunque se haga a la luz del día,
esto que están haciendo algunos bancos y cajas en España.
Estos rufianes están cobrando comisiones a la gente que acude a esas oficinas bancarias a depositar su donativo o aportación económica por ese desastre devastador del terremoto que ha asolado Haití.

En las cuentas abiertas por esas ONG´s en favor de todos los damnificados y para todo el pueblo haitiano que en los diferentes medios de comunicación se han anunciado los números de las cuentas corrientes, para que el ciudadano que quiera aportar su dinero, el que sea, lo ingrese en una cuenta para paliar en lo posible la desgracia de ese país, motivó mas que suficiente para tener esa solidaridad en la que está volcada toda la población española, pero ¡OJO! atentos a esto, al dinero rápido de esta buena gente que tiene la mejor concienciación en darlo, está encaramado el buitre del banco, que con suma destreza y no teniendo ningún miramiento moral ni humano en la que la mayoría de la gente si la tiene, estos usureros tratan de hacer su negocio, por 10 euros que mandes a los damnificados, el banco te cobra 7 de comisiones.

Hay que tener poca vergüenza y ser más marrano que nadie para llevar a cabo esta acción que les pone como la peor gente del mundo, nadie, seguro, puede estar de acuerdo con esa avara postura de querer comerciar con el dolor ajeno y con el desastre que arraso Haití, sinvergüenzas, mala gente, eso es lo que son esos tipejos.
Parece que ya no se acuerdan que hace unos meses tuvieron que refugiarse
bajo de las “faldas” del Gobierno Zapatero para que les diera esa “caridad de gobierno”, que con el aval del Estado aceptaron esa lluvia de millones para tapar sus pufos y sus agujeros negros como sus corazones, todo esto, nos referimos al dinero, sacados del Erario público del contribuyente, se lo dimos para que pudieran pagar sus malas prácticas financieras y sus derroches capitalistas a fondo perdido.

Pero no ha escapado a nadie lo que han hecho estos voraces pájaros de rapiña, el hacer negocio con la tragedia, desalmados, avariciosos sanguijuelas, mamones de lo que deja la desgracia de los demás, a estos parias de la indignidad, ofenden al ser humano al no tener ni esa mínima caridad humana hacia el pueblo haitiano víctima sufrida de esa devastación.

¿Qué es para estos desaprensivos 100.000 muertos?, pues sencillamente un negocio en comisiones que están cobrando de esos miles de millones de euros que está mandando el ciudadano a las diferentes ONG,s de España para la ayuda de Haití.

Siempre creí que esos tipos con barba de chivo, gorro con borla y vestidos con casaca que se frotaban las manos eran solo los personajes de Moliere, como el personaje Arpagon, ese avaro judío, pero ¡OH!, están aquí, por todas partes esta bandada de buitres carroñeros, que asco.

A esos que presiden o dirigen estas cajas o bancos que permiten estos atropellos sin nombre, les podemos decir el infinito desprecio que le tenemos muchos millones de españoles, aunque... se merecen más.

Salvador Barnes
Periodista
Comentarios
Hola Salvador. Te he escuchado hoy en la radio y me he quedado sorprendido al saber que existe por estos lares,el fantasma de la ópera, que con rostro invisible critica a los profesionales de los medios, presumo, sin tan siquiera conocerlos. Tu posicionamiento en las ondas me ha encantado y sabes que tienes mi apoyo incondicional en todo lo que por mi parte pudiera ayudarte. Un abrazo, Antonio P.