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Guía de Isora 21 de Diciembre de 2011
El museo de cera
No se sabe cuánta cantidad de este material, la cera, se
necesita para esculpir una figura de tamaño natural, tales
como los yernos del rey de España. Pero los apicultores,
así,  al rolaso, calculan que hace falta una buena porción
de reinas, multitud de obreras y un par de zánganos para modelar a los yernos que no se sabe aún, o sí, el porqué de su lugar en el museo de gente importante.
Con esa escuadrilla misteriosa de insectos que pican,  se pone una especie de maniquí sin vida, para que la gente vaya a ver a sus ídolos. Lo que pasa es que si estas momias cerúleas son de la familia real (me niego a escribir con mayúsculas, como a la reverencia, como a su majestad y otros vasallajes) desaparecen cuando no dan la talla moral, siempre hay alguien que encuentra la presunción, presuntamente, los pobres que tienen derecho hasta que no se demuestre lo contrario. A Mari – chalar, verbigracia,  lo bajaron al sótano del museo, tieso como un garrote, en una carretilla, que es una falta de caridad, sobre todo para el operario que manejaba la Toyota. Y ahí sigue, su excelencia, manquejiando y asesor de la alta costura a pesar de arrastrar la chola aristocrática. Y era más grande que chico, como su concuño (...) Iñaki, el yerno ideal hasta que no se demuestre lo contrario; de hecho, creo que el que manejaba el montacargas (…) quejóse de las cervicales al sindicato. No hay derecho, por favol.

Hace algunos meses escribí en este medio un artículo titulado Urdangarín, cuándo no habíase publicado casi nada sobre el asunto que, reitero,  todo el mundo lo sabía y lo sabe de las andanzas del duque de la palma de la mano, las presuntas golfadas del duque, es duque que es más que marqués, de Palma que es una ciudad tolerante y liberal, como Santa Cruz la nuestra, y que estaba hasta el cuello de corrupción, presuntamente. De don Zerolo hablaremos después del caviar, si dios quiere. Aunque en este momento dado me entero por los medios que a un abogado y futbolero que porta el gracioso apellido Del Nido del Nido y a Julián Muñoz – que bajo hemos caído – a una pena de cárcel. Menos es nada. Debería condenárseles a castrar colmenas sin protección para que sientan en sus propias carnes (…) lo que pica una reina o un zángano. O un yerno. Españoles todos, dice el rey leyendo en la pantalla (si le quitan lo escrito se queda como un Borbón). Es el espíritu de la Natividad del Señor.

Ya nadie recuerda, sólo las adictas a la revista Hola - que ya pueden leerse en los centros de salud públicos al lado de la máquina de la Coca-Cola -,   la fastuosa boda con venia paterna inclusive, de la infanta y el duque que costó un poco menos, no repararon en gastos,  que la de la hija de Aznar, el nuestro. Y que el pueblo llano como siempre y detrás de la valla,  aplaudió a rabiar porque formaban una pareja ideal, cincuenta por ciento de beneficios y con separación de bienes. Hagamos un aparte para citar que el flamante (…) auditorio de Arona se le puso el muy nacionalista nombre  de Infanta Leonor, qué poca vergüenza, presuntamente, por los mismos herederos ideológicos que negaron la construcción – ya me cansa un poco – del Hospital del Sur porque “costaba mucho su  mantenimiento” y lo tengo grabado. Y en los años que parecían buenos, dónde (…) no existía la prostitución ni las mafias, ni la banda de los argelinos, ni John Palmer, ni el Time Sharing,  ni los constructores que poco bueno construyeron. Y fue ayer, como quien dice. Lo bueno del caso es que es democrático, como los bares, depende de la gente que se arrime a la barra y de quienes estén detrás de esa barra que nadie sabe por qué se llama barra.

Pues resulta que la historia demuestra que detrás de las fortunas siempre hay algo oscuro y en las monarquías más, ya que es una clase parasitaria que heredan por la cara y por la sífilis o alguna blenorragia ancestral una casi simpática y campechana, sin pasarse, modo de ser, aunque esas caras sean manifiestamente casi mongólicas. Recobremos pues algunos versos de las Coplas a la muerte de su padre de Jorge Manrique( que era monárquico) y tal vez pariente lejano del nuestro, César,  que, parece ser que tuvo un accidente y nunca más se supo, porque a lo mejor viene al caso, depende, como diría una vulcanólogica con tres días sin afeitarse, perdón, allá en El Hierro, puede ser que sí o puede ser que no, los piroclastos salen pero  no salen y la mancha es ocre o media verdosa, pero que no cunda el pánico. Pues entonces leamos lo que escribió don Jorge demostrando que padre no hay más que uno, más que nada por recobrar a los clásicos que se esforzaron. Proceda, Morales: Versos del capítulo VII: “Si fuese en nuestro poder/ tornar la cara hermosa, corporal / como podemos hacer el alma tan gloriosa, angelical / ¡que diligencia tan viva tuviéramos toda hora / y tan presta e componer la cativa ( sic) /  dejándonos la señora descompuesta ¡ “. Y si hay curiosidad léanlo, cómprenlo y regálenlo. Es barato y una – casi – obra de arte. Muy saludable.

Casi tanto como una colmena que fabrica miel dónde interviene la abeja reina, multitud de obreras y uno o dos zánganos que  mueren post coito, presuntamente. Lo de toda la vida. Y la esencia es la jalea real o en su acepción masculina el jaleo real. Creo. Los zánganos son los zánganos y la reina es la reina, poco más puedo añadir. Y si no me creen vayan a la Casa de la Miel en El Sauzal, tierra del presidente, al que llevan abacorando sin medida ni razón, porque no hay mejor cuña que la del mismo palo.

Y como uno es diabético me abstengo de pasarme con lo dulce. Paso del turrón tan de la tierra y de los polvorones aunque sean de gofio. Y rajo cerveza como un fonil. Una perversión que hay que comprender, porque es una caridad, sobre todo en estas fechas de tanta felicidad.

Punto y seguido: lo escrito es presunto. Y lo dejamos ahí por si algún día deja de ser presunto y la decencia toma carta de naturaleza. Aunque sean figuras del belén o del museo de cera. Pobres infantas, preocupadas por la congelación de sus pensiones. Son, en el fondo, los Reyes Magos y sus pajes. Y su oro fundido en paraísos (…) fiscales que aún existen con el consentimiento de los poderosos del planeta. Islas Caimán, por ejemplo, es un nombre perfecto para refugios de piratas aunque sean de sangre azul y pasta amarilla. Suiza, verbigracia. O Mónaco, o Luxemburgo. Y otros…tan de fórmula uno, de fútbol y otras miserias que se aplauden, aunque los ídolos de la pelota luzcan en sus pechos propaganda de las corruptas monarquías petroleras. Poco importa, o nada. De hecho estoy convencido que el yerno es igual que el otro yerno y que matrimoniaron con esta saga que si nos paramos en Fernando VII es para echarse a temblar, presuntamente.

Érase una vez una infanta que esperó a su príncipe azul, mientras leía u ojeaba una revista de la aristocracia, pronto o en diez minutos, pendiente de una llamada o un mensaje en su teléfono de alta tecnología  Y así comienzan los cuentos de hadas. Como ahora.

Urdangarín que hace la segunda (…) voz del timbre de las bicicletas Orbea, que es marca vascongada, como él. Y que puede servir para un villancico cantarinamente presunto. Como la infanta Elena contando un chiste de Jaimito, el pobre. Si la fichan los de “clave de ja”, puede subir la audiencia.

Creo.

Cheche Dorta
Comentarios
Señor Cheché: En este Pais solo hay Zanganos, no existe la Monarquía, solo para pagarles un montón de Millones a unas personas que en mi umilde opinión sobran. Me niego rotundamente a doblar mi espinazo para reverenciar a otro hombre o mujer, tan solo por el mero hecho de llevar una corona. Otra cosa es el respeto, pero ese hay que ganarselo, no como ahora que les viene impuesto, de eso neda.
Fuera con la monarquía, con el senado, con las diputaciones y con las universidades públicas.