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Tenerife 7 de Enero de 2011
…Y llegaron en helicóptero
En Armeñime existe un rancho con diversos camellos, que utilizan los pocos turistas que hay en estos días para experimentar la emoción de un paseo por los alrededores. Un integrante de esta desastrosa mayoría absoluta, me aseguró que no podían utilizarse los camellos, por la dificultad de mantener estos animales tranquillos durante todo el curso de la cabalgata. Será así, no he podido contrastar esta información.
A falta de camellos, por lo visto, la única alternativa existente es un medio de transporte aéreo, el coste del cual es igual al coste de dichos animales, o menor. Esto es lo que debe pensar un ayuntamiento en donde la falta de dinero es absoluta. Por ello revisé todo el elenco de las llegadas de los Reyes Magos a las islas, publicado por un diario local, para ver cuántos ayuntamientos iban a “ahorrar dinero” utilizando este medio de transporte. Solo uno: Adeje.
En una encuesta realizada por mi cuenta a personas conocidas, algunas de ellas empleadas en el ayuntamiento, no he obtenido ni un solo motivo válido que justifique este nuevo despilfarro.
Tan solo queda pensar en: “El egocentrismo, según la psicología, es la característica que define a una persona que cree que sus propias opiniones e intereses son más importantes que las de los demás, en una exagerada exaltación de la propia personalidad. El egocéntrico hace de esa personalidad el centro de atención y lo que pretende es, según su óptica, lo único que tiene valor.”
Solo que los egocentrismos adejeros, como este, no los paga de su bolsillo el “interesado” alcalde, sino todos nosotros, el pueblo.
Pero el “populacho”, la plebe, no se preguntará a si misma cuál es la parte que le toca pagar total, ¡un poco más…, qué más da! Este verdadero señor de Adeje no tiene sensibilidad alguna. Lo único que le interesa es buscar votos a la espera de retomar este cómodo y dispendioso cargo.
Que vivan los Reyes Magos
Benito Capone
