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Arona 21 de Enero de 2008
Un mal enfoque
Estos del PP son como el juego de las siete y media, o te pasas
o no llegas. Vaya monumental error la que a criterio de muchos
analistas políticos y periodistas que seguimos la política ha
incurrido el partido con dos cosas que habrán tenido que ser muy meditadas para exponerlas tan crudamente como se ha hecho en los temas de Gallardón y de Pizarro.

El golpe dado a Gallardón no ha gustado a nadie, ni a los forofos del PP ni a los detractores del partido, por sospechar que ha habido mala fe con la forma que se ha llevado este asunto. No hace muchos días la relación y la complicidad entre Mariano Rajoy y Gallardón eran para hacer creer y prever que estaría el Alcalde de Madrid en las listas del PP, pero ya ven, se nos había despistado entre cortinas a la señora Aguirre, que ha sido un detonante en el impacto Gallardón.

Si seguimos las encuestas vamos a ver y en horas el descalabro qué se va a llevar el PP con estos inventos de gaseosa. También se proclamó a todo trapo la incursión o fichaje, llámenlo como quieran, del Sr. Pizarro, que en principio iba como gran revulsivo en las arcas de la economía, en donde todos los heraldos del PP de Madrid anunciaban que llegaba alguien que sí tenia la varita del Mago Merlín en cuanto a economía, y que ni por asomo se podía comparar el Sr. Solbes con este cerebro de Pizarro.

Todo hace pensar que es un puro pasteleo, no quieren ver la necesidades del partido, y un núcleo de ellos juega a ser más "papista" que el papa. Veremos ahora esa corriente de votantes del centro que por el órdago de Aguirre se pueden diluir como la magnesia. Para ese sector de votantes algunos de los popes del PP tendrían que estar ya apeados, para el nuevo electorado, para esos miles de nuevos votos que estarán en las urnas, por primera vez no acaban de comprender jugadas tan extrañas como la que ha ocasionado la derrota estrepitosa de un buen político y según el ranking de popularidad un buen Alcalde de Madrid.

Así se llegará a pocos sitios con estas políticas de acoso y derribo y el estar aferrado al escaño del Congreso  sin ver mas que el propio "modus vivendi" de cada uno. Esto, como ya hemos comentado, acaba de empezar, sorpresas habrán por un tubo y al resultado nos tenemos que remitir.

Salvador Barnes
barnespress@hotmail.com