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Arona 14 de Enero de 2008
Mejor que sea así
Fuerte "carcasera" se ha montado con ese tema ganso de suspender la cena de Navidad para la tropa plumífera, o sea  la prensa. Por una parte habrán pensado que ya está bien de dar de comer a esa cantidad de canaperos que arrasan en cualquier agapé que tenga a bien el Ayuntamiento de turno en invitar a una cena a los periodistas.
Se apuntan más medios que pueda haber en Madrid. Hay empresa dedicada a este "bello" menester de la prensa que manda hasta ocho pupilos de su plantilla, incluida señora de la limpieza, que por supuesto tiene todos los derechos a ir a estas invitaciones como cualquier otro empleado de la TV, radio o periódico que se precie.

La culpa es sin lugar a dudas de aquellos que se creen que al haber más gente en el agapé, más se hablará de ellos y en más fotografías saldrán, así que por este lado bien suspendida está esa cena. Pero de eso Sr. Alcalde, a decir que hay periodistas que no arriman a buena carga lo que escriben de ese Ayuntamiento, y por eso es una de las razones para que no se celebre la cena, para mi respetado Alcalde, va un abismo.

Si, sabemos que no está el horno para bollos, que el momento no está para tirar globos y darse el abrazo fraternal de desearse un feliz año, y más con gente que le han puesto a uno a caldo. Lo que pasa es que desde principios de los noventa en que un concejal de esa respetada casa dijo la célebre frase en público “para callarles invitarlos a una cena”, refiriéndose a los periodistas escasos que en aquel tiempo éramos, (creo recordar que cinco). Se levantó una estruendosa carcajada y nos quedamos con cara de poker soportando a ese ganso de la política que nos faltó el respeto a todo un colectivo.

Pues parece que el espíritu navideño está preñado de este fantasma oscuro que en su día nos dejó este inútil de la política, cuando todavía seguimos soportando el chiste fácil, la mala educación y el poco respeto hacia esta profesión del periodismo. Tengo que pensar que lo meten todo en el mismo saco, y que hay mucho “ÑO” en esta profesión, pero hay que saber clasificar.

Así que esperemos que el año siguiente tengamos más ambiente coloquial para celebrar esta cena, que sea dicho de paso Sr. Alcalde, su presencia ha sido siempre agradable por lo menos para mí , y en eso me baso para poder hacer esta respetada crítica de lo que debería de ser y seguir siendo una comunión de dos partes bien avenidas.

Salvador Barnes
barnespress5@hotmail.com