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Arona 29 de Octubre de 2007
Veinticinco años ya del 28-O

Parece un sueño o mejor una "cabezadita" en nuestro sillón
preferido de esa vida cotidiana al ver en qué han quedado
aquellos momentos bulliciosos que trajeron al socialismo al
Gobierno español después de un largo invierno de dictadura.

Veinticinco años desde aquella foto que desde una ventana del Hotel Palas de Madrid se asomaban aquellos dos jóvenes líderes del Partido Socialista Obrero Español, Felipe González y Alfonso Guerra, que con sus manos entrelazadas daban el símbolo de la unión y la fuerza, dando así un revulsivo político y de esperanza a esos diez millones de votos que les arroparon en las elecciones y que les llevó al poder. Hoy se cumplen 25 años y verdaderamente hay un gran abismo en todo lo que se ha relacionado con la idea socialista del principio. El viejo león de Felipe mantiene unas relaciones frías y distantes con la Moncloa, el inquilino Zapatero no ha resultado un buen alumno suyo, confunde los legados que el dogma socialista del momento del año 82 promulgó el partido y gracias a esa confianza que dio Felipe hoy está el PSOE en el poder. Muchas de las cosas orquestadas por Moncloa no son aceptadas por el ideario felipista, mientras Felipe reconoce que los ataques al Rey pueden minar  y tener malas consecuencias para la democracia española, para Zapatero mantiene que esos ataques no le hacen ninguna mella a la institución. Para Felipe la Ley de Memoria Histórica divide y enfrenta a la sociedad española reabriendo sus viejas heridas, para Zapatero eso impulsará al ciudadano, sin importarle las consecuencias. Como verán dos formas de pensar totalmente antagónicas, las formas de entender la sociedad bajo el prisma socialista han variado tanto que ellas mismas se atropellan. Ahora Ferraz va a conmemorar esta efeméride a la cual Felipe no ha hecho muchos elogios ni ganas de asistir a este evento, no está para celebraciones y más para que se potencia la figura  de Presidente en donde en su opinión tantas lagunas tiene en su gobierno, que dicho sea de paso, ya que es el resultado de algunas entrevistas hechas a Felipe se perfila  el poco entusiasmo que este inquilino de la Moncloa le hace. Así que la buena educación y el protocolo harán que el viejo presidente y el actual posen en fotografías para la posteridad y para toda la enorme familia, aunque desunida, del PSOE en todos los medios, pero nada ya será igual, vive el recelo y el "trepismo" en el seno del partido, viven dentro de la Moncloa muchos Presidentes a la hora de opinar de la política de Zapatero, según los nostálgicos socialistas con Felipe se murió el encanto y el orgullo de saberse vencedores de una dictadura, ahora se vive una ofuscación interna que no está bien aceptada por muchos militantes de alto poder político. De cualquier forma 25 años han dado mucho a España es un referente para la economía europea, aparte de tener un nivel de vida envidiado por muchos países. Algo tendrá el vino cuando lo bendicen

Salvador Barnes
barnespress5@hotmail.com