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Arona 18 de Octubre de 2007
¿Qué pasa, se añora al General?
Habrá que darle la culpa a esa gota fría que revuelve toda la atmósfera
y por lo que percibimos que hace que alguna gente desvaríe. De
desvariar podríamos catalogar esas declaraciones que se han editado en
un periódico gallego hechas por el ex ministro del Interior del gobierno
de Aznar, hoy eurodiputado, con esas perlas cultivadísimas que
ha dicho del "fenecido" régimen franquista.
El Sr. Mayor Oreja no se ha cortado ni un pelo en decir que "con el franquismo se vivió una situación de extraordinaria placidez, y que el franquismo representaba a un sector muy amplio de España, en el que hubieron muchas familias que lo vivieron con naturalidad y normalidad". Ha tardado el Sr. Oreja en quitarse la careta, aunque para este viaje no hacía falta ninguna alforja. En cuanto a lo natural que dice Oreja del régimen, lo tendría él y en su gente que no tuviera el tufillo de "rojos", solo para Franco eran vascos y como ya se sabe el "cangelo" que tenia Franco a todo lo que se cocía en el Pais Vasco, desde los tiempos de ese iluminado de Sabino Arana. El régimen les tuvo a casi todos los que comulgaban con el en Vascongadas (y eran muchos) en mucha consideración, o llámese miedo a que erosionaran la política de Franco. Al País Vasco se le dotó lo que en ningún territorio de las demás provincias tuvieron, de una infraestructura que era la mejor, industrias siderometalúrgicas, navales y así un sin numerar crecimiento industrial único en España, y los demás viéndolas venir y pasando hambre y miseria, aparte de esas limpias de fusilamientos que según la provincia, estaban en una media de 250 fusilados por día. Y ahora usted nos cuenta un cuento almibarado de generosidades y de normalidad en las familias que vivimos aquellos "aquelarres". Menos mal que en las elecciones a lehendakari que el Sr. Oreja se presentó no salió, si no ahora estaríamos todos en olor de santidad y cantando "montañas nevadas" como posesos. Se creía que él podía tener la solución para el País Vasco, y ya ven en lo que quedó. Pero ahora la ha pifiado usted Sr. Oreja, se ha delatado usted sólo con este coqueteo y los piropos que ha dicho de Franco, lo que ahora se llama Memoria Histórica, que parece que a usted le ha gustado, pero solo queda en decir que para todos, usted mismo se ha catalogado en ser para toda la parroquia española un fascista.
Salvador Barnes
barnespress5@hotmail.com
