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Tenerife 28 de Octubre de 2008
Santiago Pérez plantea un acuerdo común
en defensa de la autonomía de Cabildos
y Ayuntamientos
El dirigente socialista asegura que la Ley de Medidas Urgentes rompe principios fundamentales del planeamiento en Canarias
Santiago Pérez, presidente del Grupo Socialista en el Cabildo Insular de Tenerife, ha presentado una moción para instar a la Corporación a que exija la retirada de la Ley de Medidas Urgentes [LMU] por parte del Gobierno de Canarias, moción que los socialistas también irán elevando a los demás Cabildos insulares y a los Ayuntamientos, ya que la citada Ley atenta de forma frontal contra las competencias atribuidas a estas Administraciones.
Santiago Pérez explicó que “la LMU rompe y trastoca alguno de los principios fundamentales sobre los que se asienta todo el sistema legal que tiene Canarias para la ordenación del territorio y los recursos naturales, unos principios que siempre han emanado del consenso; con esta Ley se dinamita el principio básico de que no se puede realizar ninguna actividad que transforme el territorio ni autorizarse ningún uso que no esté previamente recogido en el sistema de planeamiento”. Así pues, la LMU contempla que a través de meros actos administrativos se autoricen actividades de gran impacto territorial, como podrían ser las industriales en suelo rústico.
Especialmente grave, a juicio del socialista, “es la ruptura del principio de unidad e integración de todo el sistema de planeamiento, puesto que se proponen instrumentos desde fuera del sistema que pueden modificarlo, y esto va en contra de todos los cimientos de la legalidad urbanística que rigen en nuestro país”.
Según aclaró Santiago Pérez, que también habló como secretario regional de Política Autonómica, “los socialistas presentaremos esta moción en todas las instituciones para que se inste al Gobierno de Canarias a retirar un proyecto de Ley que altera equilibrios muy delicados en los repartos de poder entre las instituciones canarias, unos repartos basados en la legalidad, la tradición y nuestra propia y evidente realidad geográfica, la que dicta que somos Islas gobernadas por Cabildos con competencias insulares muy claras”. El dirigente socialista cree que “no se puede aceptar ni tolerar que se debilite el papel de los Cabildos y se arrincone a los Ayuntamientos en el gobierno de su propio territorio, sólo por la voraz voluntad centralizadora del Gobierno de Canarias”.
Santiago Pérez desgranó algunas de las peores consecuencias de la LMU: “pretende sancionar a los Ayuntamientos que no hayan adaptado el planeamiento a las Directrices asumiendo directamente la aprobación de la estructura del planeamiento, es decir, las principales decisiones que afectan esta materia, y de igual forma se arroga la capacidad de ordenar en detalle algunos aspectos, como el suelo de uso turístico, lo que supone un peligro obvio para aquellos municipios en los que no gobierne CC; pretende definir planes de remodelación urbana y proyectos de actuación, reservándose el poder de aprobar un documento abreviado de planeamiento que modificaría los Planes Generales de Ordenación Urbana; en resumen, busca convertir a los Cabildos y los Ayuntamientos en espectadores de la concentración de poder del Gobierno canario”.
Por último, Santiago Pérez valoró el resultado del Congreso de Coalición Canaria, del que dijo que “ha demostrado que a Paulino Rivero no lo quieren ni en su propio partido, que ha vuelto al esquema de las Agrupaciones Insulares, ya que el voto en contra de la gestión de Torres Stinga es un voto en contra del propio Rivero”.
