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Arona 10 de Marzo de 2009
Pudo haber sido peor
Fotos: Dux Garuti
Las bases de una terraza de un local en el Puerto de Las Galletas ceden y casi causa un terrible accidente

Un susto increíble, y para no olvidar, fue el que vivieron unas 35 personas de la tercera edad que se encontraban cenando en Café del Puerto, un snack bar ubicado en las dependencias del Puerto de Las Galletas. “Escuchamos un ruido impresionante y sentimos cómo se movió el piso”, cuenta el encargado del local, Gerardo del Valle.

Todo ocurrió a eso de las 20.30 horas del pasado sábado cuando, al parecer, los tornillos de sujeción de los anclajes no soportaron el peso de los presentes y cedieron, causando que casi se callera la terraza al mar con todas las personas dentro. “Esto es un grave problema porque la obra está mal ejecutada”, manifiesta el encargado todavía con el susto en el cuerpo. La reacción de Gerardo inmediatamente fue desalojar el local. “”Abrí el toldo y les dije que fueran saliendo con tranquilidad para no causar mucho movimiento y no se terminara de caer la terraza”. Para el encargado del local los materiales tenían que haber sido “anticorrosivos” ya que el salitre del mar desgasta el metal.

De momento, hasta que el ingeniero no de los informes queda precintado el Café del Puerto. “Hasta que no me traigan todos los documentos donde conste que el local está en buen estado no abro”. Aunque cuentan con un seguro donde una de las cláusulas asegura que por falta de actividad tienen derecho a una indemnización, Gerardo del Valle pedirá otra por daños y perjuicios. “perdí mis ilusiones porque era un sitio maravilloso y ahora la gente va a tener miedo de venir. Va a ser muy difícil recuperarla”.

Aunque ya han visitado el local el ingeniero, el inspector jefe y técnico del ayuntamiento de Arona, fue ayer cuando Gerardo se enteró de que el Puerto de Las Galletas no tiene licencia. “Cuando fui abrir el bar me dieron todos los documentos necesarios en el ayuntamiento, pero no sabía que no tenía licencia”, y menos que estaba incluida en el caso Arona.

La licencia de obra mayor concedida por la Comisión de Gobierno de 5 de Mayo de 2006, con informe jurídico desfavorable y advertencia del Secretario Municipal forma parte de la causa penal del caso Arona.

En dicho expediente consta Informe desfavorable del Servicio de Urbanismo por cuanto incumple el artículo 27 de las Normas Urbanísticas del vigente Plan General de Ordenación Urbana de Ahorna, que exige para la ordenación del Puerto la tramitación preceptiva del correspondiente Plan Especial en el que se contemplen las determinaciones de ordenación necesarias para su desarrollo.

También incumple la Ley de Puertos Canarios en la que se dispone  que los instrumentos generales de ordenación deberán incluir entre sus previsiones las necesarias para regular la zona de servicio, y en los supuestos en que desarrollen actividades comerciales o industriales en la zona de servicio, el planeamiento deberá desarrollarse a través de un Plan Especial de Ordenación

Gerardo del Valle esperará impaciente e impotentemente la recuperación del Café del Puerto mientras se prepara para abrir otros restaurante en la zona portuaria. “Es un lugar maravilloso donde la gente viene a disfrutar y hay que brindarles lo mejor”.
Comentarios
Pero lo más increíble es el reparo a la propietaria de una empresa de informática, DAT, que es la esposa del actual concejal de Urbanismo, en relación a una factura de 1.950 euros por la adquisición de dos ordenadores portátiles por el premio a los dos mejores expedientes académicos de Bachillerato y gestionado a través de la concejalía de Juventud. Eso fue en julio de 2006 y en diciembre de 2006 todo este asunto, relacionado con Antonio Sosa y las empresas informáticas ya había ocasionado su revuelo informativo, fue denunciado en el medio de comunicación donde el Ayuntamiento tiene sus mayores rejos, de manera paradójica. Allí se ponía bien clarito que es lo que había hecho Sosa con pagos municipales, empresas y ordenadores. Un escándalo que Berto cortó de raíz, al igual que Sosa, que dejó de facturar al Ayuntamiento y que en esta nueva legislatura no ha caído en esa tentación.
La verdad es que el Sr.Alcalde tiene una suerte extraordinaria, porque si llegan a caer al mar, estaríamos hablando de otra cosa. A ver si nos vamos enterando de que no se puede hacer lo que a uno le parezca, sea con mayoría absoluta o si ella, porque el que paga las golfadas es siempre el que menos culpa tiene. Almogávar.