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Canarias 19 de Diciembre de 2009
Alarcó censura la agresión verbal a Soria
de la diputada socialista Francisca Luengo
El senador popular le exige una rectificación pues entiende que no se puede dudar del talante democrático de ningún representante público.

El senador del Partido Popular (PP) por Tenerife Antonio Alarcó censuró la agresión verbal de la diputada socialista Francisca Luengo contra el presidente del Partido Popular de Canarias, José Manuel Soria, al decir en una entrevista publicada ayer que “es un aprovechado que usa la democracia sin creer en ella” y le exige una rectificación pública.

Para el coordinador regional de Política Insular del PP hacer esta afirmación es lo mismo que llamar fascista a un político que cuenta con una trayectoria intachable. “Éste es un insulto muy grave que responde a una actitud muy irresponsable e injustificada”, aseguró el senador tinerfeño. “A estas alturas de la película, poner en tela de juicio los valores democráticos de cualquier líder político, y menos de José Manuel Soria, es intolerable, ya que fue elegido alcalde de Las Palmas, presidente del Cabildo de Gran Canaria y diputado autonómico en las urnas por los ciudadanos libremente”, resaltó Alarcó.

Antonio Alarcó apuntó que en el juego político se puede discrepar en muchas cuestiones, pero que en un Estado democrático como España este tipo de afirmaciones no se pueden dejar pasar sin denunciarlas públicamente. “Desde el Partido Popular nunca hemos dudado, ni dudaremos, del talante democrático de ningún representante público. Parece que la señora Luengo no sabe que ya hay alguien que no va a ser candidato a la Presidencia del Gobierno de Canarias y que es el momento de cambiar el tono político”, subrayó.

También criticó que Francisca Luengo se refiriera al portavoz del PP en el Parlamento de Canarias, Miguel Cabrera Pérez-Camacho, y lo llamara caradura. Explicó que la Real Academia de la Lengua define como caradura a un “sinvergüenza o descarado”, y apuntó que es impropio que alguien que representa a todos los canarios en un órgano como la Mesa de la Cámara regional se refiera en estos términos a uno de los tres portavoces de los grupos. “Además, en fechas de convivencia y relaciones humanas como las actuales este tipo de agresiones verbales, que se ubican fuera del debate estrictamente ideológico, están totalmente fuera de lugar”, concluyó.