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Santiago del Teide 24 de Marzo de 2008
El presidente de CC en el municipio defiende la desición del concejal de seguridad y el grupo de gobierno por el cese del jefe de policía
Como presidente de Coalición Canaria de Santiago del Teide, no salgo de mi asombro cada día al observar determinados comportamientos y actitudes políticas que en este municipio, por suerte, eran desconocidas hasta ahora. Me refiero a comportamientos políticos desarrollados por parte de dos portavoces de la oposición, Oliver Socas (PP) e Inocencio Doble (PSOE).
El denominador común de ambos es su afán de protagonismo y su no saber estar, que cada día queda más patente, al no diferenciar entre lo que es estar en la oposición y estar gobernando. Son dos roles distintos incomprendidos por dos concejales recién llegados a la política con dificultades de adaptación.
Como quiera que en política no hay adaptaciones curriculares, tienen tres años para ir cogiendo el tono, porque política, al menos municipal, no es sinónimo de enredo, tergiversación y si se me permite la expresión, chanchullo. Y es que en Santiago del Teide, hasta la caída de una colilla al suelo es motivo de “debate nacional”, para intentar rascar algo de popularidad y preponderancia mediática.
La obra de la Calle La Sirena fue fiel ejemplo de ello y ahora lo sigue siendo la Policía Local, sobre la que se han hecho graves acusaciones y elucubraciones sin ningún fundamento.
Ahora, el tema de discusión es el relevo en la jefatura de la Policía Local, una acción propuesta por el Concejal de Seguridad Ciudadana, Julián Hernández, consensuada con el grupo de gobierno y ejecutada por el Alcalde.
Esta acción es tachada de “irresponsable” por el portavoz popular por no contar con su opinión, y he de decir, que, aunque no le guste, el portavoz popular no es miembro del grupo de gobierno y las decisiones las toma quien gobierna, y en ello, no pinta nada. Su papel desde la oposición es el de fiscalizar la labor del grupo de gobierno como mejor entienda, que últimamente suele ser enredando.
La labor de Julián Hernández en la Policía Local de Santiago del Teide está siendo ejemplar, y no porque a mí me lo parezca, sino porque los datos y hechos lo avalan. Esto pone nerviosa a la oposición, que ve la caída de un filón en su estrategia de enredo y confrontación.
Intenta entremezclar el relevo en la jefatura con un expediente abierto al anterior jefe, algo que no está relacionado, porque el planteamiento de legislatura en la concejalía es anterior a la apertura del citado expediente, el cual está todavía sin cerrar. El mismo expediente que se envió a Cabildo y que la oposición, haciendo gala de su ignorancia, dijo públicamente que la institución insular no era competente, sin tener ni idea de lo que decían.
Las decisiones que tome el grupo de gobierno de Coalición Canaria en Santiago del Teide las hará porque está legitimado para ello, y el portavoz popular debe entender que él no forma parte de esas decisiones porque el pueblo no lo ha elegido para gobernar, lo puso en la oposición, por lo que decir que una acción de gobierno es irresponsable por no contar con él es, además de ridículo, absurdo.
Las decisiones en el grupo de gobierno de Coalición Canaria se toman en grupo y consensuadas, no al estilo que al portavoz popular le gustaría, personal y caudillista, como todos pudimos comprobar en la conformación de sus listas electorales el pasado año.
La Policía Local de Santiago del Teide está dando un giro de 360º de la mano de Julián Hernández, con el acuerdo del Alcalde y respaldo del resto de concejales y del partido en el municipio. Ese cambio lo están percibiendo lo vecinos en el día a día. Ello no gusta a quienes les interesa que el patio esté revuelto para sacar rédito.
Le quedan tres años a la oposición para hablar menos “paja” y trabajar un poquito más en pro del municipio y sus vecinos.
Jonathan Martín Fumero.
Pte. Coalición Canaria de la Villa Histórica de Santiago del Teide.
