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Docusur. 13 de Noviembre de 2007
Más de medio millar de estudiantes de Secundaria de Tenerife participan en ‘enseñanDOC’
Una de las actividades paralelas del festival Docusur en el que se comentarán tres documentales tras su visionado

Docusur se abre este año al debate y al comentario con una actividad paralela denominada ‘enseñanDOC’ y dirigida al público estudiantil de Secundaria. A lo largo de la semana llegarán al centro cultural de Guía de Isora más de medio millar de estudiantes de seis institutos de otros tantos municipios de la isla de Tenerife.

Con esta actividad, que es una de las novedades de la segunda edición del festival, se pretende “preparar a un público futuro para entender y valorar el cine documental”, según afirma el cineasta cubano, co-director y portavoz de Docusur, Rolando Díaz. “Un cine que”, añade, “tiene un espacio en algunas salas ‘alternativas’, en las grandes ciudades, pero que fundamentalmente está pensado para la televisión”.

Los jóvenes participantes en esta iniciativa provienen de institutos de Secundaria de Garachico (lunes 12), Tamaimo (martes 13), Santa Cruz de Tenerife (jueves 15), La Orotava y Buenavista del Norte (viernes 16). Por su parte el instituto Martín González, de Guía de Isora casco participa con un grupo de alumnos cada día.

El lunes los grupos de estudiantes pudieron ver la película española Bienvenidos, de Chus Barrera y Alicia Fernández. El debate estuvo moderado por el director senegalés Samba Sarr. El martes es el turno del film The Devils Miner, una producción alemana del director estadounidense Kief Davidson. En este caso, el debate posterior estará a cargo de François Verster, director sudafricano y ganador del primer premio de Docusur 2006. Por último, el jueves y el viernes se proyectará el documental Estira y Afloja, dirigido por el director catalán Pau Fenollosa, quien también se encargará de debatir con los estudiantes al término del visionado.

Para Rolando Díaz esta actividad paralela “indica la mejoría y consolidación de Docusur en la dirección que queremos seguir para que los jóvenes se animen, no sólo a ver, sino también a realizar sus propios documentales”. Díaz cree que ahora es mucho más sencillo realizar cine documental, gracias a la posibilidad de tener cámaras digitales a precios asequibles para muchas personas. “Un documental es mucho más sencillo de realizar que una película de ficción, yo mismo he hecho algún documental en una sola noche y cualquier joven puede mostrar una historia cercana, hasta de su propia familia, sin necesidad de actores profesionales, un guión y un equipo caro”. Sin embargo, Díaz reconoce que de cada quince proyectos puede haber sólo uno bueno, “porque el talento no se ha ‘democratizado’ como las cámaras de filmación”.

Docusur, con este acercamiento de los jóvenes al cine documental, pretende además dar a los estudiantes herramientas muy útiles para que reflexionen acerca de lo que supone la conformación de una cultura política, así como una participación activa, responsable y crítica en la vida pública.

Actitudes y valores como la tolerancia, la justicia social, la igualdad, los derechos humanos, la solidaridad, la participación y la dignidad humana contemplados a través de las vivencias de personajes reales, construyen un mundo más complejo y más cautivador que, inevitablemente, interroga al espectador y de algún modo lo moviliza.